Horas antes de morir mientras dormía, el viejo dramaturgo soñó, con lujo de detalles, que escribía la obra de su muerte. En el sueño el escritor dejaba la obra inconclusa y luego la guardaba en su gaveta.
El viejo dramaturgo se despertó azorado y abrió la gaveta. Allí encontró un antiguo manuscrito titulado La muerte del viejo dramaturgo.
“Me estoy volviendo loco” pensó. “Yo jamás escribiría la obra de mi muerte”.
Maravillado, y un poco asustado, se sentó a leer el manuscrito. A medida que avanzaba en la lectura, el viejo dramaturgo se convencía más y más de que el manuscrito contaba la misma historia que había soñado. Sonriente, ya casi en las últimas páginas, el viejo dramaturgo sabía que la historia no tendría final, como en el sueño. Terminó de leer la obra muy emocionado y, curioso de conocer cómo moriría, regresó a dormir.
FIN
David Norris Agosto posee una maestría en Redacción para los Medios de la Universidad del Sagrado Corazón. Se ha destacado como guionista y director de cine. En 2012 ganó el premio de mejor corto nacional en Cinefiesta con su cortometraje Gente buena.
“La muerte del viejo dramaturgo” fue uno de los treinta cuentos finalistas del Noveno Campeonato Mundial del Cuento Corto Oral, celebrado en la Universidad del Sagrado Corazón.
Previsible…Técnica narrativa impecable. Pero no se sostiene conceptualmente. No obstante. Me gustó. Le pongo un nueve. Gracias
Muy bien escrito,tiene un estilo como de pelicula de misterio.Estimula a la imaginacion.Se puede convertir en un cortometraje.